Protección y Defensa Espiritual

Protección y Defensa Espiritual

• Mediante el escudo de la fe, detengo cada dardo encendido que el adversario arroje contra mí (Efesios 6:16).

• Apago todo dardo de fuego de envidia, celos, enojo, amargura e ira dirigido a mi vida, en el nombre de Jesús.

• Bloqueo cualquier tizón enviado por el enemigo contra mi vida, en el nombre de Jesús (Isaías 7:4).

• Ato y reprendo todo espíritu de celos enfocado en mi vida, en el nombre de Jesús.

• Extingo cualquier fuego que el enemigo intente encender en mi santuario, en el nombre de Jesús (Salmos 74:7).

• Ato y expulso toda serpiente de fuego lanzada contra mi vida, en el nombre de Jesús (Isaías 30:6).

• Apago cada centella de fuego que provenga de la boca de Leviatán (Job 41:19).

• No seré consumido por el fuego del enemigo (Isaías 43:2).

• Superaré cualquier prueba de fuego enviada por el enemigo contra mi vida (1 Pedro 1:7).

• El enemigo no logrará quemar mi cosecha (2 Samuel 14:30).

• Apago todo fuego de maldad dirigido contra mi vida, en el nombre de Jesús (Isaías 9:18).

• Apago toda palabra impía pronunciada contra mi vida, en el nombre de Jesús (Proverbios 16:27).

• Extingo toda antorcha que el enemigo pretenda usar contra mi vida, en el nombre de Jesús (Zacarías 12:6).

• Apago todo chisme dirigido contra mi vida, en el nombre de Jesús (Proverbios 26:20).

• La llama del enemigo no arderá sobre mí (Isaías 43:2).